Telemarkeros chilenos !!!
Al fin, el segundo día que esquíe en La Parva, encontré telemarkeros chilenos !!!
Bueno ese día fue glorioso, no solo por el encuentro, sino por el día espléndido de sol, tras una noche nevando lo que dejó unos gruesos de powder de 15-20cm en la base y de 30cm en las partes altas.
Tengo que decir en descargo de mis comentarios sobre las 40 paellas (en mi entrada de blog del día 27) que subir desde Santiago a las pistas en día laborable es una delicia comparado con los festivos, así que la conclusión obvia es que no merece la pena esquiar alli los fines de semana, solo los laborables. Y como si se viene acá es por que se está de vacaciones pues eso…
La carretera estaba nevada, blanca, desde los 2000mts, y la estación La Parva tiene su base en los 2600 mts, el trafico era escasísimo y subí en un plisplas. A las 9h estaba esquiando y desde el primer telesilla que cogí vi a un par de telemarkeros bajando… me esperé arriba a que subieran y nos saludamos. Eran dos instructores chilenos de la escuela, que en los día que no trabajan hacen telemark… evidentemente me invitaron a esquiar con ellos y me hicieron de guía por la estación. Si la primera vez que esquié en La Parva ya me pareció fenomenal su orografía y sus fuera pistas, esta vez flipe en colores de la cantidad de recorridos salvajes y descensos recónditos de los que se puede disfrutar, sobre todo cuando te los enseñan los locales. La verdad es que mi nivel técnico de telemark les sorprendió y dejé el pabellón alto a pesar de ser una abuelete sexalescente… fue uno de los mejores días de fuera pista de mi vida, sin exagerar, no encuentro apenas comparación con ninguna otra experiencia anterior. Esquiamos sin parar desde las 9 hasta las 15h. Sin una parada técnica, ni café, ni agua… Me llevaron por unos recorridos alucinantes, con bajadas de 900mts de desnivel, pasando por quebradas o cañones encajonados sin riesgo alguno de aludes, pues ellos controlan mucho este tema. En la ultima bajada antes de comer, ya eran las dos, me llevaron por una zona que se salía de la estación y caía a la carretera que sube a Valle Nevado. En esta ultima aventura, Tomas, uno de los dos, nos dejó solos al Negro Miguel y a mi pues le llamaron por la emisora para dar clase… así que el Negro y yo la hicimos solos. Fuimos a parar después de una bajada gloriosa a 20 km de la Parva a una carretera. Allí me explicó que teníamos que pillar a alguna camioneta (para ellos así llaman a las pickups) que nos devolviera a la estación… así que hicimos dedo y a los 20 minutos tuvimos la suerte de pillar una que iba hasta los topes… pero nos paró. Una Novara como la de Pirgio, en la que iban: seis dentro y 5 fuera, más nosotros dos que nos metimos en la caja con el resto como pudimos… la mitad eran surferos e instructores que venían de otra bajada similar a la nuestra. Una juerga sensacional !!! Muy amigables y divertidos todos, entre ellos iba un freerider que participa en el circuito y conocía perfectamente a Aimar Navarro y a Adrian Millan, los cuales, me explicó, estaban ahora mismo en Las Leñas…
Finalmente invité al Negro a comer una entraña buenísima en el Montañés, un restaurante en la base de La Parva, de un asturiano afincado en Chile desde hace muchos años. Un día glorioso como pocos.